10 may 2008

Sólo me falta colgar el cartel de "cerrado por defunción". Es triste que hoy sea justo el día en el que tire por la ventana parte de mis vicios. No hay nada que me excite y no será porque no lo busco. Inodoro entre la infinita variedad de perfumes. El ciclón da vueltas demasiado rápido y no soy capaz de seguir ni el sentido de circulación. La rapidez y el desastre que lo conlleva me colocan al borde del caos de esta noche. Miento si no digo que he asesinado al bueno de la película. Con esto, habrá que concederle un premio al espectador si no se rinde ante tan grotesco espectáculo.

Ni (casi) una gota de alcohol. No lo necesito. Me estoy convirtiendo de piedra. Mi cara no coordina con mis pensamientos y los malentendidos parece que me hacen jugar malas pasadas. Esta es la historia de un tetraplégico con más movilidad que un niño de 8 años. Un estúpido hombre feliz que no sabe ni hacia donde apuntar el proyectil. Seré feliz desde la lejanía y haré de la lejanía algo más cercano desde el sedentarismo.

2 comentarios:

Lucy in sky dijo...

ze rayak sartzen ibilli aiz ?

ibilli, ibilli

edo lagun tretraplejikuak dittuzu?

Anónimo dijo...

nunbaiten irakurri nun oi...